8.25.2016

Sobre el plagio de EPN

El domingo pasado, 21 de Agosto de 2016, Carmen Aristegui y su equipo de investigación dio a conocer que Enrique Peña Nieto, presidente de la República, había hecho plagio en su tesis para obtener el grado de licenciatura.

La investigación se me hace bastante parcial, creo que se tuvo que haber entrevistado al Asesor de la Tesis, a Enrique Peña Nieto y los representantes de la Universidad Panamericana para conocer su versión del asunto. El hecho de revisar la tesis de licenciatura, las cuales normalmente son revisadas sólo por otros estudiantes que están haciendo tesis, muestra un caracter persecutorio por parte del equipo periodístico; eso no oculta el hecho, pero también pinta el perfil de Aristegui y su equipo.

Dejando de lado ese aspecto, creo que el reportaje si muestra que hubo plagio en el trabajo de Tesis. Hará falta una evaluación por la Universidad Panamericana, pues es la agraviada en el asunto.

A raíz del reportaje he leído muchas opiniones sugiriendo que no importa, si es que acaso se dio, el plagio.

Yo tuve la oportunidad de ser maestro Universitario, del 2003 al 2012 en general, y como mis alumnos espero podrán platicar, siempre fui muy estricto con el plagio de ideas. Hacer pasar las ideas de otra persona como propias es hacerse trampa a uno mismo. Durante el tiempo que fui profesor, tuve la fortuna de contar con el Internet y herramientas ofimáticas (MS Word). Esto facilita mucho validar si algo fue plagiado, sin embargo, también es mucho trabajo hacerlo.

Yo no recuerdo haber aprendido a citar correctamente en mi época de estudiante. Sabía que si algo lo copiaba lo tenía que poner entre comillas y poner la fuente, pero nada más. Fue hasta que empece a estudiar mi maestría, en Estados Unidos, que tuve que aprender como citar correctamente. El estilo de citas que se usa en mi campo de estudios es el de APA y la regla es fácil: Si copias algo, tienes que decir de donde; pero no puedes hacer un documento nuevo en base a copiar párrafos de otros, aunque estén bien citados. Un documento académico consiste en expresar tus ideas, y tus ideas las tiene que justificar dentro del mismo texto; o bien, explicar el resultado de la idea e indicarle al lector donde puede consultar la justificación de la misma.

Si digo que el cielo no es azul, sino rosa, tendría que explicar en estos párrafos porque el cielo es rosa, o bien, indicar al lector en que trabajo se hace dicha justificación. También podría poner una explicación simplificada de la justificación, igual indicando mi fuente de la misma. Si la justificación es simple, contundente, o no la quiero poner en mis propias palabras, entonces puedo poner la cita textual, ahora si entre comillas, del autor original.

Las ideas nacen de otras ideas, lo que vemos, leemos, y escuchamos nos inspiran a crear nuestras propias ideas. Literariamente, y comercialmente, esto se vuelve algo complicado pues un autor puede leer un libro y de ahí inspirarse para crear otro, que el autor original ve como una copia al suyo. Pero ese es otro tema, y para eso hay abogados especiales que se dedican a dilucidar esos casos.

En mi época de profesor universitario era estricto con el manejo de las referencias por dos razones: mi función era ayudar a las personas que tomaban clases conmigo a pensar, a formular sus propias ideas en base al material cubierto en clase. Dos, a reconocer aquellas fuentes que los habían ayudado a formular sus argumentos; tanto por la cuestión moral de se debe de hacer, como tratando de ponerlos en los zapatos de los autores y mostrar que el hecho de robar ideas es por demás ruin.

Nunca fue fácil como profesor que los alumnos entendieran la importancia de no plagiar. El reto no era para ellos no hacerlo, sino hacerlo de una forma en la que no me diera cuenta. Y es toma bastante tiempo revisar para darse cuenta si alguien plagio o no. Es imposible saber de memoria todas las fuentes que pueden ser copiadas. Bien podrían copiar tal cual de Wikipedia en español o del Rincón del Vago, o ser más emprendedores y buscar en Wikipedia en inglés y ellos mismos traducirlo. Al final tenía que ser más una labor de convencimiento más que de capataz. Pero vivía en un mundo donde copiar era parte social, pasarse tareas, copiar del libro, memorizar lo que alguien más dijo, comprar películas piratas. La protección de ideas era algo secundario.

La mejor forma de darse cuenta si alguien plagia es leyendo su trabajo, normalmente hay un cambio en la redacción, en la voz, en el tono, algo salta cuando un párrafo es copiado. En temas más especializados, puede que leas un párrafo o una idea que sabes pertenece a alguien más. Pero si la función del revisor es asegurarse que el autor no plagie, entonces se esta en el lugar equivocado.

En una tesis de licenciatura es aún más complicado andar revisando para plagiar. La función del asesor es ayudar al estudiante a profundizar sobre un tema y expresar su opinión, pero no es enseñarlo ni a pensar ni escribir documentos citando correctamente; para eso ya estuvo 8 o 9 semestres estudiando. Sin importar que en la época en la que Peña Nieto escribió su tesis era aún más complicado validar para no plagiar,  esa no era (es) la labor del asesor. Obvio, si te das cuenta regañas al estudiante y le explicas como escribir; a nivel tesis, tal vez consideres decirle que a la otra que hago algo igual se le dará de baja o se le iniciará un proceso académico. Porque la elaboración de la tesis es la última etapa de formación donde el estudiante aún puede fallar.

Si el asesor se dio cuenta que Peña Nieto plagió, o lo asesoró para que lo hiciera. Muy mal por el asesor por haberlo permitido.

Si el comité se dio cuenta, muy mal por el comité.

Aunque debo admitir que no conozco a nadie que haya reprobado su examen de defensa de tesis profesional.

Pero principalmente, muy mal por Peña Nieto. Hacer pasar una idea ajena como propia no es ético. La tesis de licenciatura es donde el estudiante pone en armonía sus conocimientos para formular sus propias ideas. Si solamente las copió, entonces su proceso de formación falló. Si el asesor le dijo que copiará, y él lo hizo, también muy mal por prestarse al juego.

El plagio de ideas es corrupción, y si él lo hizo, entonces es parte de la corrupción.

¿Quien revisa las tesis de licenciatura? A menos que haya sido una tesis que gano premios o fue publicada, la tesis sólo es leída por el Asesor, a lo mejor por el comité, y por el autor. Posteriormente algún alumno que le interesa el tema, o que quiera hacer una tesis con el mismo asesor, pero conforme pasa el tiempo, la tesis se lee aún menos. Una tesis como la de Peña Nieto, no creo que haya sido leído por más cinco de personas. Aristegui fue por la tesis a buscarla, en algo que muestra un afán de venganza.

¿Es equivalente al los casos de los políticos que plagiaron en la tesis de doctorado y tuvieron que renunciar? No creo, la tesis de doctorado es crear nuevo conocimiento, plagiar en ella es engañar a la sociedad en general. La tesis de licenciatura es crear ideas propias, Peña Nieto se engaño a él, a su asesor, a su comité y la Universidad Panamericana. Ellos deberán revisar el caso de acuerdo a su comité de ética, y tomar las medidas que amerita.

Creo que este caso pinta el perfil de los dos personajes principales. Peña Nieto se engañó a él mismo, y fue corrupto para lograr su título de abogado. Aristegui en un afán de venganza no dejo piedra sin voltear hasta encontrar algo que Peña Nieto hizo mal, lastima que lo que encontró no le interesa a la mayoría de los Mexicanos.